El Padre Ayala nos inspira en este inicio de curso
Un visionario que cambió la educación para siempre
En la época en la que le tocó vivir, el analfabetismo alcanzaba al 60% de la población. La sociedad de nuestro país sufría un importante retraso económico con respecto a otras naciones europeas y la Iglesia no pasaba por el mejor de sus momentos. De hecho, la influencia de los católicos era muy poco relevante. Por estas razones, el Padre Ayala trabajó a lo largo de su vida no solo para dejar su impronta en el mundo de la educación, también en la vida pública. Estaba convencido de que la acción de los católicos debía estar presente en todos los sectores de la sociedad.
Una de sus frases más reconocidas es la que menciona la necesidad de conquistar el corazón de los niños con un trato amable y cercano, preocupándose además por la felicidad del otro:
“Entendiendo que lo primero en la obra educadora es conquistar el corazón, con un amor que se entiende y agradece, con un trato amable y preocupándonos de su alegría”.
Su gran capacidad para conectar con los más jóvenes es toda una inspiración para varias generaciones de educadores. Dedicó toda su vida a la pedagogía, aportando una visión innovadora que aún tiene vigencia. De hecho, es responsable del concepto “pedagogía activa”, que planteó por primera vez en su obra Prácticas de Pedagogía (Madrid, 1919). Con este libro sentó las bases de una nueva forma de enseñar, abierta a los distintos campos de conocimiento y del arte. Es decir, una enseñanza dirigida a potenciar las cualidades propias de cada alumno, a la vez que fomenta de forma sólida su espiritualidad. A través de ella se formaron figuras imprescindibles en la sociedad y la política españolas del siglo XX.
Los principios del pensamiento del Padre Ayala están muy presentes en el modelo educativo de los Colegios CEU, basado en la innovación. El trabajo diario de nuestros educadores se centra en estimular las competencias y habilidades de nuestros niños y jóvenes, potenciando las conocidas como STEAM (Science, Technology, Engineering, Arts, Mathematics). A la vez, enfocamos la formación desde el humanismo cristiano, para educar a los hombres y mujeres del futuro. Serán capaces así de influir en la sociedad para cambiarla a mejor, con unos sólidos valores cristianos y una vida feliz; no en vano su bienestar es una de las grandes preocupaciones de los Colegios CEU.
Las ideas del Padre Ayala no solo están presentes en el día a día de nuestro centro; son toda una fuente de motivación para arrancar el curso 2019-2020 y alcanzar los mejores resultados “haciendo” e interactuando con la realidad.