El móvil: droga y delito según Emilio Calatayud
Emilio Calatayud, uno de los jueces de menores más experimentados de España, protagoniza uno de los últimos capítulos de “Haciéndote Preguntas”, un espacio de la Fundación Universitaria San Pablo CEU donde se profundiza sobre los temas que más importan.
El juez Emilio Calatayud es conocido por sus sanciones ejemplares y su clara postura sobre la educación de los niños. Nos habla, entre otros temas, sobre la adicción a los móviles y a las Redes Sociales.
“He tenido casos de chavales que me han reconocido, sin saberlo sus padres, que -aprovechando el COVID- han estado 18 horas diarias usando el móvil”.
En su opinión, el móvil “es una droga”. “Es también un instrumento muy peligroso para cometer hechos delictivos y para ser víctima de delitos”.
En este “Haciéndote preguntas”, el juez Calatayud se refiere también a la “gran diferencia” que existe entre los adolescentes actuales y los de generaciones anteriores. “Hace veinte años eran más legales -reconocían lo que hacían-, y lo padres no justificaban a esos chavales. Ahora justifican todo y creen que su hijo es un Santo”.
Emilio Calatayud se muestra muy crítico con el sistema de educación actual, y culpa tanto a padres como políticos, pero especialmente a los políticos “porque durante 40 años no han sido capaces de llegar a una Ley de Educación. “Tenemos a unos padres que no tienen autoridad sobre sus hijos y tenemos a unos maestros que no tienen autoridad ni sobre los hijos ni con los padres, y no se les reconoce cuando tienen la consideración de funcionarios públicos”, afirma.
“¿Te puedes creer que en el siglo que estamos puedo condenar al año a unos 25 chavales a aprender a leer y a escribir? ¿Y a 250 al año a cursar la educación Secundaria, cuando es obligatoria?”, se lamenta.
El juez Calatayud es conocido por sus sentencias, y a este respecto defiende que hay muchas formas de reparar el delito, y no solamente con la privación de la libertad, como el trabajo social, “y así estamos logrando que el 85% de los que llegan a la Justicia de Menores no lleguen a los Juzgados de Mayores”, argumenta.
Asegura que como los padres no tienen autoridad, es mucho más difícil la educación de los hijos. “Ahora hay que dialogar, hay que razonar, hay que argumentar… Es muy difícil educar, es muy difícil ser padre y es muy difícil ser hijo”.
Los padres responden por los actos de sus hijos menores, “por eso me preocupa que nos limiten las facultades que tenemos como padres y nuestras obligaciones”, afirma. “El legislador está jugando a que los niños son mayores, pero son niños…”.
Emilio Calatayud advierte también de que ahora mismo hay mucho más peligro en casa por las Redes Sociales que en la calle. Y explica que hay delitos cometidos por menores que “están subiendo como la espuma”: el maltrato de hijos a padres, tanto físico como psicológico; el bullying; los abusos sexuales y las violaciones; delitos contra el honor y contra la imagen. “Y, además, comenten delitos todos, es decir, se han equiparado las clases sociales”.
“Hay que ser optimista”, concluye, porque también “tenemos gente joven muy buena”. “Tengo esperanza. La educación de un país es la cultura, es la libertad, y yo creo en Dios, y rezo para que nos dé luz otra vez”.