Educar para el ‘nosotros’
Javier Urra, psicólogo de la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia y de los Juzgados de Menores de Madrid, pone énfasis en la necesidad de “olvidar el yo” y anima a los padres a “educar en la diferencia”.
Esta sociedad es muy yo-yo, pero lo importante es el “tú”. El “somos”, frente al “yo”, -afirmó- es fundamental”.Javier Urra
Javier Urra nos invita a que enseñemos a nuestros hijos un juego muy importante: “el que no sabe lo que siente el otro, pierde”. Es fundamental enseñar a nuestros hijos también el respeto a uno mismo y a los demás. “Es en los ojos del otro donde existimos, no “soy”, “somos””. Por eso es necesario enseñar la generosidad, la gratitud, el sentido del humor, la ilusión… “De los jóvenes actuales, me preocupa ver que han perdido la ilusión, la pasión por la vida”, lamentó.
Urra también reflexiona sobre temas de actualidad como el acoso escolar y los elevados niveles de depresión en adolescentes, con los riesgos que esto conlleva. Frente a la violencia, Javier Urra nos anima a estimular la sensibilidad, sobre todo en los varones. “La clave más importante es la compasión y la empatía: Si tú te pones de verdad en esa empatía con el dolor del otro, no le dañas”.
Afirma, además, que los problemas no están en la calle; están en los hogares, “donde hay todo un mundo de complejidades. Nacer en un hogar o en otro te marca la vida”. Y respecto a los problemas de salud mental en adolescentes, comenta que: “Tenéis que transmitir a vuestros hijos que sean ciudadanos, no que sean consumidores”. “Vamos a empezar a fortalecer su carácter para la vida. De lo contrario, estamos creando jóvenes de cristal”.
Asimismo, Urra destaca el valor de la palabra, cómo nos comunicamos. “El lenguaje, especialmente el afectivo, es esencial”. En este sentido, nos animó a enseñarles a hablar de sí mismos y de sus sentimientos, porque “el lenguaje es un colchón emocional absolutamente necesario”.
Se muestra muy favorable al esfuerzo; a la asertividad, a ese saber decir “no”; a enseñarles a asumir las responsabilidades a título individual; a enseñarles la importancia de enseñarles a perdonar y dejarse perdonar. “Soy muy favorable al sentimiento de la culpabilidad”.
En cuanto a la educación en valores, afirma que lo fundamental es educar con el ejemplo. “Demos lo mejor de nosotros mismos. Los padres tienen que tener un proyecto de vida y transmitírselo a sus hijos, y también tienen la obligación de trasladar a los chicos el sentido de espiritualidad y el concepto de fraternidad”.