Consejos para afrontar la EBAU
Trescientos mil estudiantes de toda España se examinan desde este lunes de la EBAU, la prueba de acceso a la Universidad.
La prueba supone el 40 % de la nota para el acceso a la universidad y la media de Bachillerato representa el 60 % restante. La convocatoria de 2023 será la última en la que se mantiene el formato de los tres últimos cursos, condicionados por la covid, que da más facilidades al alumnado, dado que puede elegir entre distintas opciones de preguntas.
Estos días previos son momentos de mucho nerviosismo para los alumnos porque temen que todo el esfuerzo del año se pueda ir a la basura. Les aterra pensar que todo su futuro pueda depender de un examen de un día.
Juana María Sánchez, del servicio de Orientación Universitaria de la Universidad CEU Cardenal Herrera, aconseja que los estudiantes «descansen y vayan bien alimentados», que se «acuesten pronto el día anterior, procuren descansar para estar más preparado y pensar con más claridad. Alimentarse bien les dará energía para superar las pruebas».
Para superar esta prueba «tan temida» con éxito, los alumnos, según señala la experta, deben comprobar dónde se examinan, en qué centros y en qué aula. Si es posible, la recomienda visitar el centro con antelación, para que el estudiante se sienta «más seguro y más tranquilo»: «Sé puntual, levántate con tiempo el día del examen, desayuna tranquilamente y acude con al menos media hora de antelación».
Los alumnos que se vayan a presentar a la prueba de acceso a la Universidad deben confiar en su capacidad, dejar a un lado los pensamientos negativos, concentrarse en el examen y escuchar bien las instrucciones del tribunal, que dará pautas para realizar la evaluación correctamente.
El primer día de examen es muy importante porque es el día que tienen más nervios y se enfrentan a algo desconocido. Con el objetivo de evitar «cualquier momento de nervios y angustia», el profesor de Bachillerato Ventura González hace hincapié en la importancia de organizar el día antes del examen todo lo necesario: bolígrafos, calculadora, diccionario, material técnico y DNI.
Recomienda a los estudiantes que cuando les entreguen el examen, “se lo tomen con cama y dediquen cinco minutos a su lectura, “verán que no era para tanto”. Además, les propone presentar el examen lo mejor posible, “porque es la tarjeta de visita que va a tener el corrector”, estructurando bien las preguntas, sin cometer faltas de ortografía y procurando que el papel «esté limpio”.